TRANSGÉNICOS, TIERRAS, TRAGEDIA Y POLÍTICA


PARAGUAY: TRANSGENICS, LAND GRABBING, TRAGEDY, AND POLITICS  . (extracted from an article originated in boletín OGM sent by Gerd Schnepel, galci-bounces@list.ifoam.org  on behalf of Gerd Schnepel (GERDSCHNEPEL2043@yahoo.com ), Jun.23, 2012)
The aforementioned article is titled Monsanto golpea en Paraguay” (Monsanto hits Paraguay), by Idilio Méndez Grimaldi *.   VERSIÓN EN ESPAÑOL, MÁS ABAJO


 Image: The presidents of UNASUR consider that the due process of political trial was not respected. Picture: Archivo La Nación.

The Unión de Gremios de Producción (UGP), Paraguay powerful Farmers Union, was preparing a national protest event against the government of Fernando Lugo for June 25, 2012. One of the claims of the so called “tractorazo” was the liberalization of the transgenic seeds for comercial cultivation in Paraguay.
On Friday June 15th, a group of police forces that was going to enforce an eviction in the Department of Canindeyú, by the Brazilian border, was ambushed by snipers interspersed among campesinos that requested lands to survive. As a result, there were 17 deaths: 6 policemen and 11 campesinos, and dozens of seriously injured. The social and campesinos’ organizations were accused to instigate campesinos to oppose the advance of the extractivist agribusiness in the hands of transnational corporations such as Monsanto.
On October 21st., 2011, the Ministry of Agriculture and Livestock illegally had freed the use of Monsanro’s Bollard BT, the GM cotton, to be sown commercially in Paraguay. Protests from campesinos and environmentalists followed right along. The National Quality and Plant Health and Seeds Service, SENAVE, other institution of the Paraguayan State, did not register the transgenic seed in the cultivar registry because it lacked the approval of the Health Ministry and the Environmental Secretary, as required by the legislation.
On the occasion of an annual exhibition organized by the Ministry of Agriculture and Livestock, Monsanto presented another cotton variety, doubly transgenic: BT and RR (Roundup Ready) manufactured and patented by Monsanto. The Ministers of Health and of the Environment did not give a veredict favorable for Monsanto.  On the other hand, the Chamber of Deputies approved in general a Biosecurity Bill that includes the creation of a biosecurity direction in the Ministry of Agriculture, with ample capacity of approval of the commercial cultivation of all transgenic seeds.
The UGP was preparing a national protest act against Fernando Lugo’s government on June 25, 2012, with farm machinery in the roads. One of the claims of the so-called “tractorazo” was the firing of the SENAVE’s officer that did not approve the transgenic seed, as well as the liberalization of all transgenic seeds for their cultivation in Paraguay.
Paraguay is one of the most “unequal” countries of the world: 85% of the land – some 30 million hectares – is in the hands of 2% of the owners (National Agriculture Census) land that is dedicated to extractivist exploitation or, in the worst case, land speculation.
In such situation, a lot of 2,000 hectares was occupied by landless campesinos that had been asking Fernando Lugo’s government to distribute them. A judge and a public prosecutor ordered the eviction of the campesinos, through the Special Group of Operations (GEO) of the National Police, whose élite members are specially trained for the counterinsurgent fight.  The police force was attacked in an ambush resulting 6 dead; the counterattack resulted in 11 campesinos dead, and 50 seriously wounded.
The campesino movements accuse the landlord to criminalize all campesinos’ organizations taking them to the extreme hatred, in order to push campesinos out of the lands so that they can use them for their exclusive agribuisiness. It is a slow, painful ‘de-campesination’ process of the Paraguayan country that threatens the food sovereignity, and the food culture of all the guaranitic peoples.
After the sad incident, the government decreed the elimination of the protocol for dialog with campesinos that invade properties. The message is that there will be no conversations, but simply law application, that means to employ repressive police forces without any contemplation.
(*) Newspaperman, researcher and analyst, Member of Paraguay’s Society of Political Economy, SEPPY

Note of the Editor: Up to here, very briefly and objectively the facts presented in the aforementioned article. As it already is of public domain, in just five hours of pure tension, the Paraguayan Senate judged and fired president Fernando Lugo for 39 votes in favor, and four against. Outside Congress, Lugo’s simpathisers exploded in indignation when they heard the sentence, and clashed with the police that fought them with tear gas. In the face of the speedy destitution process, regional leaders reacted in haste and backed Lugo almost without exception. While Brazil’s president Dilma Rousseff warned Paraguay that it could be ousted from the regional organisms, Argentina’s president Cristina Kirchner qualified the act as a “Coup of State”.  La Nación, Argentina, 23 de Junio, 2012.

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PARAGUAY: TRANSGÉNICOS, CONCENTRACIÓN DE TIERRAS AGRÍCOLAS,  TRAGEDIA Y POLÍTICA. (extraído de un artículo originado en el boletín OGM y enviado por Gerd Schnepel, galci-bounces@list.ifoam.org  on behalf of Gerd Schnepel (GERDSCHNEPEL2043@yahoo.com ), Jun.23, 2012)
El artículo mencionado se titula Monsanto golpea en Paraguay”, por
Idilio Méndez Grimaldi
*.
 Image: Los presidentes de la Unasur consideran que no se respetó el debido proceso de juicio político. Foto: Archivo La Nación 
La Unión de Gremios de Producción (UGP) venía preparando un acto de protesta nacional contra el gobierno de Fernando Lugo para el 25 de junio próximo. Una de las reivindicaciones del denominado “tractorazo” era la liberalización de todas las semillas transgénicas para su cultivo comercial en Paraguay.
El viernes 15 de junio de 2012, un grupo de policías que iba a cumplir una orden de desalojo en el departamento de Canindeyú en la frontera con Brasil, fue emboscado por francotiradores, mezclados con campesinos que reclamaban tierras para sobrevivir. Como resultado se tuvo 17 muertos; 6 policías y 11 campesinos y decenas de heridos graves. Las organizaciones sociales y campesinas fueron acusadas de instigar a los campesinos a oponerse al avance del agronegocio extractivista de manos de las transnacionales como Monsanto.
El 21 de octubre de 2011, el Ministerio de Agricultura y Ganadería, liberó ilegalmente la semilla de algodón transgénico Bollgard BT de la Monsanto, para su siembra comercial en Paraguay. Las protestas campesinas y de organizaciones ambientalistas no se dejaron esperar. El Servicio de Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas, SENAVE, otra institución del Estado Paraguayo no inscribió dicha semilla transgénica en los registros de cultivares, por carecer de los dictámenes del Ministerio de Salud y de la Secretaría del Ambiente, tal como exige la legislación.
En ocasión a una exposición anual organizada por el Ministerio de Agricultura y Ganadería, Monsanto presentó otra variedad de algodón, doblemente transgénico: BT y RR o Resistente al Roundup, un herbicida fabricado y patentado por Monsanto.  La ministra de Salud y el ministro del Ambiente no dieron su dictamen favorable a Monsanto.
Por otro lado, en la Cámara de Diputados se aprobó en general el proyecto de Ley de Bioseguridad, que contempla crear una dirección de bioseguridad a cargo del Ministerio de Agricultura, con amplia potestad para la aprobación para su cultivo comercial de todas las semillas transgénicas.
La UGP venía preparando un acto de protesta nacional contra el gobierno de Fernando Lugo para el 25 de junio con maquinarias agrícolas. Una de las reivindicaciones del denominado “tractorazo” era la destitución del funcionario del SENAVE que no aprobó la semilla transgénica, así como la liberalización de todas las semillas transgénicas para su cultivo comercial en Paraguay.
Paraguay es uno de los países más desiguales del mundo. El 85% de las
tierras, unas 30 millones de hectáreas, está en manos del 2% de propietarios (Censo Agropecuario Nacional 2008) que se dedican a la producción meramente extractivista o, en el peor de los casos, a la especulación sobre la tierra.
Así las cosas, una parcela de 2.000 has. fue ocupada por campesinos sin tierras que venían solicitando al gobierno de Fernando Lugo su distribución. Un juez y una fiscala ordenaron el desalojo de los campesinos, a través del Grupo Especial de Operaciones, GEO, de la Policía Nacional, cuyos miembros de élite en su mayoría fueron entrenados para la lucha contrainsurgente. Los efectivos policiales fueron atacados en una emboscada causando la muerte de 6 militares, cuyo contrataque produjo la muerte de 11 campesinos, quedando unos 50 heridos.
Los movimientos campesinos acusan a los terratenientes de criminalizar, llevar hasta el odio extremo, a todas las organizaciones campesinas, para empujar a los campesinos a abandonar el campo para el uso exclusivo del agronegocio. Es un proceso lento, doloroso, de descampesinización del campo Paraguayo, que atenta
directamente contra la soberanía alimentaria, y la cultura alimentaria del pueblo Paraguayo, por ser los campesinos productores y recreadores ancestrales de toda la cultura guaraní.
Luego del luctuoso incidente, el gobierno decretó la eliminación del protocolo de diálogo con los campesinos que invaden propiedades. El mensaje es que no habrá conversación, sino simplemente la aplicación de la ley, lo que significa emplear la fuerza policial represiva sin contemplación.
(*) Periodista, investigador y analista. Miembro de la Sociedad de Economía Política del Paraguay, SEPPY

Nota del Editor: Hasta aquí, suscintamente, los hechos comentados por el artículo de la referencia. Como es ya de público conocimiento, en apenas cinco horas de pura tensión, el Senado del Paraguay juzgó y destituyó al presidente Fernando Lugo por 39 votos a favor y cuatro en contra. Fuera del Congreso, miles de simpatizantes de Lugo estallaron de indignación cuando escucharon la sentencia y chocaron con la policía, que reprimió con gases lacrimógenos. Frente al veloz proceso de destitución, los líderes de la región reaccionaron con celeridad y respaldaron casi sin fisuras a Lugo. Mientras la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, advirtió que Paraguay podría ser expulsado de los organismos regionales, Cristina Kirchner lo calificó como un "golpe de Estado". La Nación, Argentina, 23 de Junio, 2012.


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